lunes, 1 de febrero de 2010

LOS ROMPIMIENTOS….


Los eventos en donde los "Artistas Marciales" de cualquier sistema, tratan de hacer proezas increíbles son cada vez más numerosos. Cierto es que este tipo de espectáculos sólo sirven para atraer a un público numeroso y crédulo, con fines de lucro. ¿Pero qué tan efectivo es aprender o realizar rompimientos?; ¿Funcionará para defendernos algún día? ¿Cuál es la motivación para realizar rompimientos? La verdadera motivación para llevar a cabo este tipo de prácticas se encuentra en los estratos más profundos de la mente y el cuerpo. De hecho la demostración de fuerza es obligada en la mayoría de las especies del reino animal, no sólo por una cuestión bélica, también para impresionar al sexo opuesto. En el caso de los seres humanos esta demostración de "fuerza" sirve para ganarse un lugar dentro del ambiente social en el cual las personas se desenvuelven. Por lo regular, los rompimientos se utilizan para enganchar nuevos clientes o adeptos, aunque esta práctica nada tiene que ver con el profundo y espiritual significado de las Artes Marciales. De hecho este tipo de ejercicios sólo son una demostración de las muchas habilidades que se pueden obtener mediante la práctica constante y cabe hacer la aclaración que no se necesita ser Cinturón Negro para poder realizar alguna clase de rompimiento, sólo es cuestión de la aplicación adecuada de: Técnica, física y mecánica, así como de los materiales adecuados para los rompimientos. Hay que saber diferenciar entre un sutil rompimiento o Tamashiwari, con fines de desarrollo de destreza, velocidad y fuerza de impacto; de los Actos de Faquirismo en los que algunos pseudo artistas marciales han caído. Los florecientes shows nos han traído una amplia gama de actos, como romper pedazos de concreto, quemarse las manos y los pies, caminar sobre vidrios, clavarse cuchillos y agujas, etc. Estos actos circenses se hacen muchas veces en el nombre de las Artes Marciales, lo cual es una tremenda aberración, ¿Es esto Arte Marcial? No, el nombre es Faquirismo. El Arte Marcial es muy serio y considerado como una forma de vida (DO, TAO), por lo que luce como fraude el que traten de inducir al público a creer que se tienen poderes mágicos con la práctica de las Artes Marciales. Los Artistas Marciales desarrollan habilidades sorprendentes, pero nunca tiene como finalidad romper lozas, tabiques o concreto, etc. Cierto es que si algún faquir ha practicado algún sistema marcial, superara en credibilidad a los demás faquires que no han estudiado artes marciales, sin embargo esto no justifica que sus "actos increíbles" los respalde diciendo que son secretos o prácticas de las artes marciales. El Faquir puede llevar a cabo actos sorprendentes pero siempre serán explicables.
En el campo de las artes marciales se tiene la creencia de que los rompimientos sirven para que el alumno pueda demostrar todo lo que ha aprendido, para que cuando llegue el momento pueda noquear al más rudo de sus oponentes, pero como todavía no aparece ese malandrín, el practicante tendrá que hacer rompimientos, al fin que lo que se va a romper, tablas, ladrillos, etc. No regresan los golpes. Sin embargo la filosofía de de las artes marciales, para quienes las practican con profesionalismo, va más allá de estos actos, ya que brinda una paz interior y genera gran seguridad, por lo que no hay necesidad de demostrar nada a nadie. Hace años solía realizar "espectaculares exhibiciones" Rompía mosaicos para piso con la frente, Ladrillos envueltos en llamas con la mano encendida, tablas, caminaba y me acostaba sobre vidrios, rompía bloque huecos de concreto (Bovedilla), me doblaba cuchillos en el abdomen etc. Pero todo esto sólo ayudaba a desvirtuar el Arte Marcial y caer en el faquirismo. Todo esto que realizaba tiene una explicación así como todos los rompimientos o actos tienen su explicación, no se trata de que yo fuera un súper hombre o que tenía poderes sobrenaturales, ¡No!, todo se explica cómo se dijo en líneas superiores con la aplicación de la física y la mecánica, sin olvidar la química; por ejemplo: Rompimiento de cuatro o cinco ladrillos rojos envueltos en llamas con gasolina, y la mano que efectuaba el rompimiento también envuelta en llamas con gasolina, 1) Los ladrillos se seleccionan evitando los excesivamente quemados (sería imposible romperlos) 2) entre ladrillo y ladrillo se coloca una pequeña fajilla de madera para separarlos entre sí y se colocan firmemente en alguna base como dos bancos o dos pilas de ladrillos. 3) Se impregnan de gasolina los ladrillos y la mano, 4) se encienden los ladrillos y cuando las llamas se encuentran en pleno apogeo se arrima la mano impregnada de gasolina y esta se enciende, 5) se realiza rápidamente el rompimiento. 6) un auxiliar está listo con una franela mojada y cubre la mano de quien efectúa el rompimiento apagando de esa manera el fuego, por enfriamiento y por eliminación de oxigeno. La gasolina solo ardía por encima de la mano, si no se apagara a tiempo continuaría el fuego ya consumiendo la mano. Como se aprecia no es necesario ningún poder especial para realizar dicho acto, no obstante es mi deber advertir que no lo intente, el riego no deja de existir. Así podría explicar el resto de los actos que realizaba y hago la aclaración nuevamente ya no me interesa realizar este tipo de exhibicionismo. 
 
El Prof. Hizaola preparandose a realizar rompimiento de ladrillos en llamas, con la mano encendida
 
El Prof. Hizaola Realizando el rompimiento
 
 
Finalización del cuadruple rompimiento

Este artículo, no pretende herir sensibilidades, sólo refleja mi muy particular punto de vista actual al respecto. Y aprovecho para reiterar a quienes han dejado sus comentarios en este blog que respeto el querer y el hacer de cada quien, que probablemente no comparta o acepte su opinión pero daría lo que fuera por defender su derecho a la libre expresión. Ratifico no me interesa confrontar o competir en Rompimientos, nunca he participado en esa clase de competiciones, ni lo pienso hacer, no tengo necesidad de reconocimiento o de trofeos, medallas y mucho menos de elevar mi ego. Respetuosamente rechacé el reto que el Dr. Aniceto López me hizo mediante e-mail, y mantengo mi postura y le deseo que continúe con su senda y su interés. 
 
e-mail respuesta de invitación a reto de rompimientos por el Dr. Aniceto López

 
En esta captura de pantalla se aprecia mejor la respuesta respetuosa y negativa

¿Quieres ver el video de rompimientos del Profesor Aniceto López?
sigue este link:
http://www.youtube.com/watch?v=exck8AjnYuk

Si gusta ampliar información sobre el tema de los rompimientos y el faquirismo léase: La revista Armamento Edición Especial # 2 Artes Marciales páginas de la 08 a la 11, Articulo Rompimientos, por el Prof. Enrique Flores. (Julio 1999); También la Revista Artes Marciales #1 páginas de la 04 a 07, Artículo Lo cierto, lo falso y lo feo, Rompimientos, por el Prof. Enrique Flores. (Septiembre 1999)
Cordialmente
Prof. Enrique Hizaola Rosas

 

2 comentarios:

  1. Recuerdo esos tiempos en que hacia rompimientos (por exhibición y no por competencia) con un fin, promocionar el arte marcial, ahora opino lo mismo que usted Prof. Hizaola. No hay que crear falsas espectativas en los practicantes.

    Solo hay que entender la diferencia entre lo contemporáneo y lo tradicional, esto refiriéndonos a las competencias.

    Ahora recuerdo unas palabras de mi Si-Jo. Jesús González: "Para qué quieres romper objetos? Si no puedes romper tus propias ataduras, tu ego, tus pensamientos mundanos?

    Y por cierto, excelente control del Chi por parte del Prof. Aniceto, me recuerda a usted hace algunos años... Saludos.

    _____________________________
    Iván González de la Rosa.
    Escuela Loto Blanco.
    Los Guerreros del Sol. A.C.

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  2. Gracias Iván, tienes razón la premisa es vencerte a tí mismo, a tus temores y egos, creo que hay etapas que nos permiten el real autodescubrimiento y el disfrutar lo que haces en su momento. Las situaciones cambian, los pensamientos evolucionan, la naturaleza mima marca no siempre es primavera, también se tiene el resto de estaciones.Las prioridades cambian.
    Recibe un saludo marcial.
    Cordialmente
    Enrique Hizaola Rosas

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